A las comisiones del Parlamento Europeo no les gusta el ACTA

Tres comisiones parlamentarias han votado en contra del tratado antipiratería conocido como ACTA. La comisión de libertades civiles dice que no respeta los derechos fundamentales de la UE, la comisión de industria opina que no establece un equilibrio entre derechos y libertades y la comisión de asuntos jurídicos no cree que deba recomendar que se apruebe el acuerdo.

un teclado con una cadena
Foto:PE

La Comisión de libertades civiles dice que el acuerdo antipiratería no respeta la Carta de derechos fundamentales de la UE e insta a la comisión de comercio internacional, que todavía debe dar su dictamen, a que «recomiende al Parlamento que no apruebe el acuerdo». La decisión la ha tomado por 36 votos a favor, uno en contra, y 21 abtenciones.

Los diputados que integran la comisión de libertades civiles han subrayado que Europa necesita un acuerdo internacional para reforzar la lucha contra la piratería, pero que el que adopte debe ser compatible con sus tratados. Según los europarlamentarios, ACTA no garantiza el respeto total a la vida privada y a la plena protección de informaciones personales sensibles. Añade que se debe evitar la ambigüedad cuando lo que está en juego son los derechos fundamentales y que ACTA «presenta varios niveles de ambigüedad».

La comisión parlamentaria dice también, que los proveedores de Internet no deberían vigilar la red e invitan a la Comisión Europea y a los Estados miembros a que velen para que quede claro desde el punto de vista jurídico el papel de esos proveedores.

Por su parte la comisión de industria ha echado atrás el ACTA por 31 votos contra 25. Dice que el acuerdo no asegura un equilibrio entre los derechos de propiedad intelectual, la libertad de las empresas, la protección de los datos personales, y la libertad de recibir o proveer información. Añade que en lo que respecta a la propiedad intelectual no tiene en cuenta las características específicas de cada sector. Mantiene que la indefinición del acuerdo podría crear una inseguridad jurídica en las empresas europeas. Amelia Andersdotter, del partido Pirata sueco se ha declarado «muy satisfecha» de esta opinión.

En cuanto a la comisión de asuntos jurídicos ha votado contra el informe de la parlamentaria Marielle Gallo del PPE, FR, por 12 votos contra 10 a favor y 2 abstenciones.

El próximo 21 de junio dará su opinión la comisión de comercio internacional. El informe final pasará al pleno del Parlamento que debe dictaminar si se adopta.

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