Cárcel para quienes manipulen el euribor

La Comisión Europea ha propuesto tipificar como delito la manipulación de índices de referencia, como el libor o el euribor, y castigar con penas de cárcel los casos más graves. Al destaparse el escándalo británico de manipulación por los bancos, Bruselas ve evidencias de que existen lagunas en la supervisión y pide «tolerancia cero» para los que califica como «banksters».

Los comisarios Barnier y Reding explican sus propuestas
Los comisarios Barnier y Reding, contra la manipulación de índices / Foto:CE

La manipulación del libor en el Reino Unido revela «un nuevo ejemplo de conducta escandalosa de los bancos», dice el comisario de Mercado Interior, Michel Barnier. «La confianza pública se ha hundido», apunta su colega de Justicia, Viviane Reding.

Cualquier manipulación de los índices de referencia fundamentales repercute gravemente en la integridad del mercado y puede provocar pérdidas importantes para los consumidores y los inversores o falsear la economía real, argumenta la Comisión Europea para proponer una reforma legislativa a nivel europeo que declare ilegal esas prácticas y se castigue penalmente en todos los países. Ha quedado claro que la autorregulación no funciona.

Así que Bruselas introduce cambios en sus propuestas de reglamento y directiva sobre las operaciones con información privilegiada y manipulación del mercado, pero no quiere establecer los tipos de sanciones penales y sus niveles mínimos, aunque exige a los Estados que los fijen en sus legislaciones nacionales. En su propuesta original de directiva, la Comisión preveía analizar en un plazo de cuatro años qué sanciones se prevén y, en todo caso, introducir normas comunes mínimas.

La comisaria Reding ha dicho que «el libor y muchos otros índices similares juegan un papel clave en la gestión de riesgos de nuestra economía y el impacto se nota en casi todos los servicios financieros y productos del planeta». Calificó la manipulación de «fraude» y recomendó a los banqueros que reflexionen sobre su comportamiento, «porque algunos quizás son más bánksters» y actúan «como propietarios de casinos corruptos que apuestan con los ahorros de sus clientes».

También fue duro el comisario Barnier al juzgar a los bancos manipuladores de índices de referencia, que demuestran, en su opinión, «una ausencia total de moral, un comportamiento escandaloso de algunos actores financieros en detrimento directo de los ciudadanos, de las empresas y de las autoridades públicas».

El escándalo destapado en el Reino Unido sobre un posible pacto entre los bancos para manipular el libor y el euribor está siendo investigado por el comisario de Competencia, Joaquín Almunia.