El 'si' al referéndum sobre la 'inmigración masiva' abre una brecha entre Suiza y la UE

Suiza ha votado y ha ganado el 'si' por una ajustada mayoría del 50'4 % partidaria de poner cupos a la inmigración que puede poner patas arriba la relación entre la confederación helvética y la UE. La Comisión Europea ha «lamentado» el resultado de la votación y advierte de que examinará detenidamente «las implicaciones de esta iniciativa» a la vista de la decisión que tome el gobierno suizo para aplicarla.

Carteles animando al
Suiza vota 'si' al cupo de inmigrantes

La reacción de los Estados miembros no ha tardado, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble, ha dicho que el resultado del referéndum «ocasionará muchas dificultades a Suiza en muchos ámbitos».

Por su parte el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, se ha mostrado partidario de que Europa revise sus relaciones con Suiza después del «preocupante» resultado de la votación. En cuanto a la vicepresidenta Europea y comisaria de Justicia, Viviane Reding, ha dicho que «el mercado único no es un queso suizo. No puedes tener un mercado único con agujeros».

En referencia a los acuerdos que Suiza tiene con la UE que comprenden el libre movimiento de personas, bienes, capitales y servicios. En 1999 Suiza y la UE firmaron siete acuerdos bilaterales, transporte, investigación, agricultura, mercados públicos y libre circulación, todos están ligados entre sí.

El Gobierno suizo tampoco está muy satisfecho con el resultado del referéndum. Seis de los siete ministros que forman el gobierno son contrarios al 'si'. El único a favor es el ministro de Defensa, Ueli Maurer, de la UDC la formación de derecha populista que ha planteado la consulta.

Según la UDC la emigración 'masiva' procedente de la Unión es la causa de que los transportes públicos estén sobrecargados, de la subida de los alquileres o del dinero que según ellos se les va en prestaciones sociales a los inmigrantes.

El presidente de turno de la confederación, Didier Burkhalter, piensa hacer una gira por las principales capitales europeas para explicar el resultado de la votación.

En Suiza existía un sistema de cupos para admitir inmigrantes y peticionarios de asilo por el que cada año se podían registrar unas 8.000 llegadas. El acuerdo de libre circulación se ha ido aplicando de forma progresiva desde 2002 y con la crisis han ido llegando cada vez más, unos 80.000.

Antes de poner en marcha el acuerdo libre circulación había un 20 % de extranjeros en el país y en 2013 un 23,5 %, en total 1.880.000 personas de las que 1.250.000 preceden de la UE. Los más numerosos italianos y alemanes. La tasa de paro en Suiza fue en 2013 del 3,2 % de la que el 2,2 % son naturales del país.