En Asturias abastecerán a pequeños municipios con minicentrales hidroeléctricas

El proyecto Lifehygenet, aprovecha los saltos de agua potable, que se encuentran en las redes de distribución y que normalmente se pierden, para ofrecer un servicio a pequeños consumidores, ya sean empresas, ayuntamientos, colectivos agrícolas, etc... En elevados desniveles entre el embalse de captación de agua potable y el depósito de almacenamiento, es necesario instalar un dispositivo para evitar que la presión rompa la tubería.

Equipo Hygenet
Equipo Hygenet

Normalmente ese agua se desperdicia, y los investigadores de la Fundación asturiana Proditec, han ideado un artilugio que permitirá aprovechar esa energía con unos pequeños dispositivos, que no solo son más baratos que las grandes infraestructuras, sino que además se pueden trasladar sin grandes problemas.

El proyecto está basado en generar energía eléctrica «limpia» cumpliendo con los acuerdos de la Comisión Europea en relación al empleo de fuentes de energía renovables. «Colaboramos así a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y, por tanto, al cumplimiento del protocolo de Kyoto y del Plan de Energías Renovables del gobierno de España», dice el coordinador del proyecto, Alejandro Fernández Hernández. Este químico asegura que se generará cerca de 700.000 KWh de energía eléctrica limpia de manera anual y, por tanto, un ahorro de emisiones de gases de efecto invernadero.

- ¿Cómo pensásteis en este proyecto?

Habíamos visto como se desperdiciaba agua y energía en construcciones que ya existen como son las canalizaciones de agua potable y pensamos en la posibilidad de aprovechar esa energía mediante dispositivo. Tras realizar una primera aproximación a la viabilidad del mismo a través de un proyecto regional con INGEMAS, financiado por el FICYT en Asturias vimos que los resultados eran muy interesantes y por tanto, abordamos la presentación del proyecto al programa LIFE+.

Sobre todo pretendíamos cubrir las oportunidades de generar energía limpia a partir de recursos ya existentes, siendo una alternativa a los dispositivos generales hidroeléctricos más convencionales utilizados hasta la fecha. En este sentido, lugares más remotos, siempre que cumplieran con requisitos de caudal y altura, podrían disponer de energía eléctrica para autoabastecimiento de una manera sencilla y económica, dice Alejandro Fernández.

- Un proyecto que supera las dificultades

Las instituciones y las pymes que participan tienen una capacidad limitada de personal, financiación y por eso la aportación de más de 700.000 euros ha sido fundamental para poder desarrollar el proyecto. El coordinador explica que «este dinero ha favorecido, lógicamente, al mantenimiento de los puestos de trabajo de las empresas, porque un proyecto que lleva asociado, diseño, fabricación, y traslado de equipos, así como trabajos de coordinación y difusión, muestra en sí mismo su importancia en cuanto a personal involucrado». Fernández añade que «en la situación económica actual hubiera sido casi imposible abordar de manera interna el 100% del desarrollo del mismo. Por ello, la financiación del programa Life+ ha resultado esencial para el desarrollo del mismo».