Arlene Chang
El secretario general adjunto de la ONU, Jan Eliasson (a la izquierda), en conferencia de prensa.

La respuesta de la comunidad internacional se quedó corta ante el desplazamiento mundial de 60 millones de migrantes y refugiados, obligados a abandonar sus hogares o países debido a la persecución, los conflictos armados y el hambre.