El BCE mantiene los tipos de interés y anuncia que guarda nuevas medidas en la recámara

El Banco Central Europeo, en su reunión mensual, ha decidido mantener los tipos de interés en mínimos históricos del 0,05 por ciento y anuncia que pone en marcha nuevos estímulos para evitar la deflación y el estancamiento en la eurozona y que todavía le quedan más recursos.

Mario Draghi y el subdirector del BCE en rueda de prensa
Mario Draghi director del BCE y el subdirector del banco, Vitor Constancio/ Foto: BCE

El BCEmantiene también los tipos de depósitos en el -0,20 por ciento, es decir los bancos tienen que pagarle al banco central si quieren dejar sus fondos en Frankfort, y el tipo marginal en el 0,30 por ciento.

El presidente del BCE, Mario Draghi, ha anunciado en la rueda de prensa posterior a la reunión de presidentes de bancos centrales que van a continuar con la compra de bonos y que van a comenzar «pronto» la compra de valores respaldados por activos, estos programas, ha dicho, tendrán una duración de al menos dos años.

Así mismo ha anunciado que llevarán a cabo una serie de operaciones de financiación a más largo plazo, hasta junio de 2016, con las que espera que la economía vuelva a la situación de principios de 2012.

Draghi ha asegurado que estas medidas mejorarán el funcionamiento del mecanismo de transmisión de la política monetaria, el apoyo a las condiciones de financiación en la zona euro, facilitarán que el crédito fluya hacia la economía real y que genere externalidades positivas en otros mercados.

A pesar de estas medidas, si la economía no se agilizara y continuara la tendencia a la deflación, Draghi ha anunciado que el Consejo de Gobierno del BCE «tiene el compromiso unánime» de poner en marcha otras medidas no convencionales. Para asegurar que la intención es firme y para que haga efecto en los mercados ha dicho que han encargado a los expertos de la entidad bancaria europea y a los comités pertinentes del Eurosistema que preparen nuevas medidas que se puedan poner en marcha, si fueran necesarias.

El BCE está echando mano a toda su artillería porque no ve clara la situación. La economía de la zona sigue a la baja. En particular, ha dicho Draghi, «el debilitamiento en el ritmo de crecimiento de la zona euro, junto con los riesgos geopolíticos», podrían socavar la confianza y, en particular, la inversión, privada. Además, el progreso insuficiente en las reformas estructurales en los países de la zona del euro constituye un riesgo añadido para las perspectivas económicas, ha dicho.