El festival de Málaga premia el cine de Manuel Martín Cuenca

Voz personal e innovadora, creador osado e inclasificable, así destaca el Festival de Cine de Málaga el trabajo del director almeriense Manuel Martín Cuenca, al que acaban de entregar el Premio Eloy de la Iglesia por toda su trayectoria.

Martín Cuenca en rueda de prensa
Martín Cuenca, ganador del premio Eloy de la Iglesia del Festival de Málaga/ Foto: Festival de Málaga

Voz personal e innovadora, creador osado e inclasificable, así destaca el Festival de Cine de Málaga el trabajo del director almeriense Manuel Martín Cuenca, al que acaban de entregar el Premio Eloy de la Iglesia por toda su trayectoria.

Joven, nacido en El Ejido en 1964, y osado como pocos,la carrera de Martín Cuenca se ha desarrollado prácticamente en paralelo con el propio Festival de Málaga al que presentó en el año 2000 su primer corto «Nadie». Sólo un año después, se zambullía en el complicado género documental con «El juego de cuba» por el que recibió el premio al Mejor

Documental del festival. Luego llegaron la polémica «Últimos testigos: Carrillo, comunista», un retrato del líder político que estuvo nominado al Goya y sus largometrajes más conocidos «La flaqueza del bolchevique», «Malas temporadas», «La mitad de Óscar»...

El Festival de Málaga, que ya entregó este galardón a Isaki Lacuesta y Cesc Gay, ha premiado el riesgo y el nivel de exploración y búsqueda cinematográfica al que se somete Martín Cuenca. «He intentado ser un artesano del cine, alguien que no intenta hacer siempre la misma película y que no entiende el cine como una industria comercial, sino como una forma de exploración artística», explicaba el realizador al recibir el Premio.

Manuel Martín Cuenca acaba de terminar el rodaje de su última película, «Canibal», la historia de un asesino en la sombra, un demonio al que sólo el amor puede redimir, duela lo que duela. El protagonista de la película es su amigo y actor Antonio de la Torre que equilibra el tandem amor-dolor con la rumana Olimpia Melinte y la sevillana Alfonsa Rosso.

«Canibal» está inspirada en un relato del escritor cubano Humberto Arenal. «El hecho de que el canibalismo sea un tabú enorme, me hace pensar que hay algo en su naturaleza tan cercano a nosotros que hemos decidido prohibirlo. Pienso que las prohibiciones siempre esconden algo y que debemos interrogarnos sobre ellas, aunque sea para llegar a la conclusión de que deben existir. Jean Genet escribió: «El beso es la forma de la primitiva ansia de morder, incluso de devorar... Esta historia tiene lugar en los márgenes y en la quiebra emocional», explica el director.

«Canibal» ha sido producida por La Loma Blanca y MOD Producciones en coproducción con Libra Films (Rumanía), CTB Film Company (Rusia) y Luminor (Francia). Cuenta, además, con la participación de TVE, Canal Plus, Canal Sur y AXN, y el apoyo de Ministerio de Cultura, Junta de Andalucia, Media e Ibermedia. «Canibal» ha recibido también el apoyo de Eurimages, las ayudas que la Comisión Europea concede a la co-producción cinematográfica a proyectos que tengan al menos dos co-productores de dos diferentes Estados miembros.

Con su premio bajo el brazo, Manuel Martín Cuenca, un artesano del cine empieza esta semana a montar y post-producir «Canibal», cine negro y película romántica para gourmets que disfruten de platos muy fuertes.