España sale de la lista de países con desequilibrio excesivo y entra Italia

La Comisión ha sacado a España de la lista de desequilibrios excesivos, aunque advierte que todavía tiene importantes retos que salvar, en especial los altos niveles de paro y de endeudamiento. Italia ocupa un lugar en la lista por su elevada deuda pública y su baja competitividad. Otro país que ha recibido una seria advertencia ha sido Francia que si sigue así no cumplirá los objetivos de déficit.

Ollie Rehn en la rueda de prensa
Ollie Rehn, informa de los desequilibrios macroeconómicos/ Foto: CE

España, ha dicho el vicepresidente económico de la CE, Olli Rehn, ha adoptado importantes decisiones políticas en el último año y eso ha ayudado al ajuste de los desequilibrios excesivos y a vuelta de la confianza. «España ha vuelto a crecer» ha dicho Rehn, pero subsisten importantes retos - ha añadido -, en especial «el muy alto nivel de desempleo y el todavía elevado nivel de endeudamiento.

Rehn, que ha anunciado que ha recibido el encargo de coordinar el trabajo de la Comisión para apoyar la estabilización financiera y el desarrollo económico en Ucrania, ha hecho un repaso de la situación económica en la Unión.

Ha comenzado diciendo que la UE no ha superado aún sus propios problemas y que queda mucho trabajo por delante para volver a tasas de crecimiento aún más sostenibles y sólidas con niveles más altos de empleo.

De los 17 países cuyas economías se someten regularmente al escrutinio de la Comisión, tres no tienen desequilibrios, Dinamarca, Luxemburgo y Malta. Otras tres tienen desequilibrios excesivos, Croacia, Italia y Eslovenia. Las otras 14, Bélgica, Bulgaria, Alemania, Irlanda, España, Francia, Croacia, Italia y Hungría también tienen desequilibrios aunque no tan pronunciados.

Los países que han sido rescatados no entran en estos grupos ya que están siendo vigilados cada uno dentro de su memorando.

En cuanto a las grandes economías de la eurozona, Italia tiene una deuda pública muy alta que planea no sólo sobre el país, sino que también podría tener efectos indirectos negativos en el resto de la eurozona. Existe el riesgo de que el ajuste del saldo estructural en 2014 sea insuficiente, dada la necesidad que tiene de reducir su gran deuda pública a un ritmo adecuado.

La crisis, ha debilitado a los bancos que no pueden tirar de la economía y eso se ve en la persistente dificultad de las pymes para obtener créditos asequibles. Rehn, anima al nuevo gobierno italiano a que adopte rápidamente medidas para estimular la creación de empleo.

A pesar de las medidas que ha puesto en marcha para fomentar la competitividad, Francia no remonta. La Comisión pone reparos a la reciente subida de salarios en función de la productividad y señala que eso «pesa sobre los márgenes de beneficio de las empresas y debilita la capacidad de invertir». Francia podría no cumplir las metas fiscales este año.

Alemania, es todo lo contrario, su competitividad económica externa va viento en popa. Y eso está muy bien si no fuera porque quiere decir que los alemanes están invirtiendo en el extranjero, mientras que la inversión privada y pública interna es muy pequeña desde hace tiempo. Así que necesita más apertura y competitividad en el sector servicios especialmente para que el país crezca y el resto de Europa también.

Eslovenia, uno de los países con desequilibrios excesivos, corre el peligros de no cumplir con los objetivos presupuestarios, así que tiene que continuar con las reformas. Croacia, por su parte, tiene una serie de problemas externos e internos. Empresas públicas muy endeudadas y las tasas más bajas de actividad y empleo de la UE.

La Comisión tiene la intención de seguir más de cerca las políticas económicas recomendadas por el Consejo a los Estados miembros que tienen desequilibrios excesivos, Croacia, Italia y Eslovenia. Pero también va a vigilar con atención a otros a los que recomienda que sigan con las reformas como Irlanda, España y Francia.

Según la normativa de la UE los Estados miembros deben tomar medidas para reducir los desequilibrios si no quieren arriesgarse a una multa.