Los recortes en el presupuesto de la UE enfrentan a países ricos y pobres

El presupuesto marco de la Unión Europea para los próximos siete años está bloqueado por las diferencias entre los 27 a la hora de hacer recortes, entre los que dan y los que reciben ayudas. La propuesta que ahora está sobre la mesa quiere reducir gastos en política agrícola y fondos de cohesión, lo que perjudicaría seriamente a España. Galicia, Andalucía, Castilla-La Mancha y Murcia podrían dejar de recibir subvenciones europeas.

Proyecto financiado con fondos europeos en Cádiz
Proyecto financiado con fondos europeos en Cádiz / Foto: euroXpress

La Comisión Europea presentó un proyecto de perspectivas financieras para el periodo 2014-2020 de 971.000 millones de euros, un 5% más que en el actual presupuesto plurianual. Ahora, los países de la UE que son contribuyentes netos quieren recortes en todas las partidas. Se autodenominan «amigos de mejorar el gasto» y reúne al Reino Unido, Finlandia, Holanda, Alemania, Austria, Italia, Suecia, Finlandia y Dinamarca.

Todos están por el ajuste, pero también entre ellos hay diferentes posiciones. Desde Finlandia, que hace hincapié en recortar, sobre todo, el gasto administrativo, hasta Suecia que propone reducir el presupuesto en 100.000 millones de euros y suprimir el fondo de solidaridad, o el Reino Unido, que parece conformarse con congelar las cuentas.

Una propuesta de Dinamarca y Suecia, que ha asumido la presidencia rotatoria de la UE, reclama reducciones en la política agrícola y que se supriman las ayudas a las regiones llamadas en transición, es decir, las que tienen un PIB entre el 75% y el 90% de la media comunitaria. En esa categoría están Galicia, Andalucia, Castilla-La Mancha y Murcia.

El secretario de Estado español para la UE, Íñigo Méndez de Vigo, ha dicho que esos puntos son «líneas rojas» que España no está dispuesta a aceptar. «Desde el punto de vista de un país que va a presentar este jueves un sólido ajuste en su presupuesto nacional, la idea según la cual los ajustes nacionales deben corresponderse con ajustes presupuestarios a nivel europeo, es incorrecta», señala Méndez de Vigo, para quien la UE debería tener en cuenta «la crisis económica que estamos padeciendo y ayudar a los países que están en una peor situación».El político español considera que se pone en riesgo la recepción de fondos de las regiones transitorias sin haber tenido en cuenta las repercusiones de la crisis económica.

En el próximo periodo presupuestario España se convertirá, por primera vez, en contribuyente neto a las arcas de la UE, pero la Comisión Europea había propuesto mantener dos tercios de los fondos que reciben las regiones en transición. Si prosperan los recortes previstos a los fondos de cohesión, solo Extremadura mantendría las subvenciones del actual periodo 2007-2013, ya que su PIB es todavía inferior al 75% de la media comunitaria.

En este punto España podría contar con la ayuda de Alemania porque alguna de sus regiones también se verían afectadas, y con el bloque de países que se dicen «amigos de la cohesión», en el que se incluyen Eslovaquia, Bulgaria, República Checa, Croacia, Estonia, Grecia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia, Portugal, Rumanía y Eslovenia.

En vista del enfrentamiento entre los 27, la presidencia chipriota presentará una nueva propuesta de compromiso, con cifras concretas, y después pasará la pelota al presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, para que negocie con cada uno de los Estados antes del 22 de noviembre, cuando se debería aprobar la propuesta final.