«La consolidación fiscal exagerada y simultánea en todos los países no es la mejor respuesta para la crisis mundial y puede, incluso, agravarla, llevando a una mayor recesión» ha dicho Dilma Rousseff. La presidenta de la sexta economía mundial cree que la austeridad no ha sido capaz de consolidar su principal objetivo, el equilibrio fiscal. «En virtud del bajo crecimiento y de la austera rebaja en los gastos, asistimos ahora al crecimiento de los déficits fiscales en lugar de a su reducción, lo que a su vez conduce a una reducción del PIB», ha dicho.

El primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho y el presidente español Mariano Rajoy se han quedado solos en su defensa de los ajustes. «La salida de la crisis pasa por la disciplina y el ajuste fiscal», ha dicho Passos Coelho. Por su parte el presidente español ha expresado su confianza en que la recuperación económica comience en España a finales de 2013. Ha dicho que podría ser antes si se resolviesen los problemas de financiación a «precios razonables».

El presidente de la Comisión Europea José Manuel Durao Barroso, ha hecho hincapié en la necesidad de priorizar el crecimiento. «En la Comisión estamos utilizando todos los instrumentos a nuestra disposición para recuperar el crecimiento en Europa y así crear empleo y hacer frente a los graves problemas sociales».

Ha criticado abiertamente que algunos países quieran rebajar el presupuesto de la UE. Una alusión a Reino Unido que quiere que haya un severo ajuste en el gasto. «Pensamos -ha dicho Barroso- que hay una contradicción cuando algunos países dicen que quieren priorizar el crecimiento y después no quieren apoyar el principal instrumento que tenemos a nivel europeo para las inversiones en crecimiento».

Ha resaltado la importancia estratégica que la UE da a sus relaciones con los países de América Latina «ninguna otra parte del mundo está más cerca de Europa como el continente americano. Somos aliados naturales y hemos desarrollado una creciente relación de interdependencia», ha dicho.

En cuanto a la relación comercial entre la UE y América Latina, ha explicado que se ha duplicado en la última década llegando a más de 202.000 millones de euros en 2011.

La declaración de Cádiz, que han aprobado los mandatarios de América Latina, España y Portugal, marca seis ejes de actuación fundamentales:

Desarrollo económico al servicio de los ciudadanos, desarrollo de infraestructuras en transporte, telecomunicaciones, energía y uso sostenible del agua

Promoción de las pequeñas y medianas empresas, y aún de las microempresas para incrementar la productividad y la competitividad

Estímulo a los procesos de innovación

Fortalecimiento de las instituciones

Impulso de la educación y del espacio cultural iberoamericano

Creación de trabajo decente

Para que estos objetivos puedan realizarse, la Declaración propone promover políticas de crecimiento incluyente, además de políticas de desarrollo sostenibles y medioambientales.

Los participantes en la Cumbre han decidido respaldar la celebración de una sesión especial de la Asamblea General de la ONU antes de 2015 sobre el problema de la droga.

La próxima cumbre se celebrará en Panamá del 18 al 19 de octubre, fecha que coincide con el quinto centenario del descubrimiento del océano Pacífico por el español Vasco Núñez de Balboa.