ONUSIDA señala un avance sostenido en la respuesta al sida

En vísperas del Día Mundial del Sida 2013, ONUSIDA señala un avance sostenido en la respuesta al sida

Se necesita un compromiso renovado en Europa oriental y Asia central, Oriente Medio y el norte de África, y también respecto a las poblaciones clave.

GINEBRA, noviembre de 2013 — Aunque en la mayor parte del mundo se ha registrado un progreso acelerado, hay signos preocupantes de que algunas regiones y países no están en condiciones de alcanzar los objetivos y compromisos globales en materia de VIH.

El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) informa de que las nuevas infecciones por el VIH han aumentado en Europa oriental y en Asia central en un 13 % desde 2006, mientras que en Oriente Medio y el norte de África se han duplicado desde 2001.

En muchos casos, ese parón en el avance se ha debido a la falta de acceso a servicios esenciales relacionados con el VIH. Con frecuencia, las poblaciones clave —como los hombres que tienen relaciones homosexuales, los usuarios de drogas, las personas transgénero y las trabajadoras sexuales— no pueden acceder a servicios vitales.

«Cada persona importa», afirmó Michel Sidibé, director ejecutivo del ONUSIDA. «Si queremos mantener nuestra promesa de no abandonar a nadie, tenemos que garantizar que los servicios relacionados con el VIH lleguen a quienes los necesitan.»

Las inversiones centradas en llegar a las poblaciones clave no han mantenido el ritmo necesario. La financiación de los servicios de prevención del VIH para hombres que tienen relaciones homosexuales es especialmente escasa en Asia oriental, Oriente Medio y norte de África, así como en el África subsahariana. Las inversiones van muy a la zaga en varios países que tienen una alta prevalencia del VIH entre consumidores de drogas inyectables: diez países en una prevalencia del VIH superior al 10 % entre consumidores de drogas inyectables asignan menos del 5 % del gasto en materia de VIH a los programas de reducción de daños. Por otro lado, pese al desproporcionado riesgo de las trabajadoras sexuales de contraer el VIH, solo una exigua parte de los fondos para la prevención del VIH mundialmente se destina a programas de prevención para las trabajadoras sexuales.

No obstante, pese a que queda mucho trabajo por hacer en Europa oriental, en Ucrania 2012 ha sido el primer año en que el número de nuevas infecciones ha sido menor que en años anteriores, lo que supone un punto de inflexión en ese país. Se estima que en Ucrania viven con el VIH 200 000 personas; la mayor prevalencia se da entre los consumidores de drogas inyectables, con un 21,5 %.

Sin embargo, la colaboración entre el gobierno ucraniano y organizaciones de la sociedad civil está logrando proporcionar servicios esenciales para el VIH para las poblaciones clave, basando sus inversiones y programas en los datos. Además, Ucrania modificó en 2011 su ley en materia de sida: ahora garantiza los servicios de reducción de daños para los usuarios de drogas inyectables, la confidencialidad respecto al estado serológico para las personas que viven con el VIH y la eliminación de las restricciones de viaje relacionadas con el VIH.

Los niños y los mayores de 50 años requieren una mayor atención

En los países prioritarios, solo reciben tratamiento contra el VIH tres de cada diez niños que deberían recibirlo según las directrices terapéuticas de la OMS de 2010. Los niños que viven con el VIH siguen sufriendo déficits persistentes en el tratamiento. En 2012, 647 000 menores de 15 años recibían tratamiento antirretrovírico. Ese mismo año, la cobertura del tratamiento del VIH para los niños (34 % (31-39 %)) seguía siendo la mitad que la cobertura para los adultos (64 % (61-69%)), según las directrices anteriores.

«Hemos visto un enorme compromiso político y excelentes resultados para reducir la transmisión maternoinfantil del VIH, pero les estamos fallando a los niños que contraen el virus», añadió el Sr. Sidibé. «Necesitamos urgentemente mejores herramientas de diagnóstico y medicamentos adecuados para los niños, con independencia del tamaño de ese mercado.»

Aunque el número de niños que recibían tratamiento antirretrovírico en 2012 aumentó un 14 % en comparación con 2011, la amplitud de ese aumento fue considerablemente menor que para los adultos (un 21 %). El fracaso en muchos entornos para ampliar el acceso al diagnóstico precoz para los recién nacidos es una importante razón que explica por qué la cobertura del tratamiento del VIH sigue siendo mucho menor para los niños que para los adultos. En tres países prioritarios, Chad, República Democrática del Congo y Malawi, la cobertura del diagnóstico precoz para los recién nacidos en 2012 fue inferior al 5 %.

Una tendencia cada vez más importante en la epidemia mundial del VIH es el creciente número de personas mayores de 50 años que viven con el VIH. Se estima que en todo el mundo hay 3,6 [3,2–3,9] millones de personas mayores de 50 años con el VIH. Ese «envejecimiento» de la epidemia del VIH se debe principalmente a tres factores: el éxito del tratamiento antirretrovírico en la prolongación de la vida de las personas que viven con el VIH; la disminución de la incidencia del VIH entre los adultos más jóvenes, con lo que la carga de morbilidad se desplaza a edades más avanzadas; y el hecho, raramente medido y por ende pasado por alto, de que los mayores de 50 años están adoptando comportamientos de riesgo que también se ven entre los más jóvenes.

Datos mundiales del sida

Se estima que en 2012 hubo 2,3 millones de nuevas infecciones por el VIH, lo que supone una reducción del 33 % desde 2001. Ese año las nuevas infecciones por el VIH en niños se redujeron a 260 000, con una disminución del 52 % desde 2001. Gracias a la expansión del acceso al tratamiento antirretrovírico, las muertes relacionadas con el sida han disminuido en un 30 % desde el máximo alcanzado en 2005.

A finales de 2012, unos 9,7 millones de personas de países de bajos y medianos ingresos tenían acceso al tratamiento antirretrovírico, lo que significa un aumento de casi el 20 % en solo un año. En 2011, los Estados Miembros de la ONU acordaron una meta para llegar a 15 millones de personas en tratamiento para 2015. Sin embargo, con la ampliación de la cobertura del tratamiento y con las nuevas pruebas sobre los beneficios en materia de prevención del VIH del tratamiento antirretrovírico, la Organización Mundial de la Salud ha establecido nuevas directrices para el tratamiento del VIH, ampliando el número total de personas que se considera que necesitan tratamiento en más de 10 millones.

También se han logrado resultados significativos para cubrir las necesidades de los pacientes con tuberculosis que viven con el VIH, pues las muertes relacionadas con la tuberculosis entre las personas que viven con el VIH han disminuido en un 36 % desde 2004.

Pese al estancamiento en la financiación de los donantes para el VIH, que se situó en torno a los niveles de 2008, ha aumentado el gasto nacional, que representaba el 53 % de los recursos mundiales para el VIH en 2012. Los recursos mundiales totales disponibles para el VIH en 2012 están en torno a 18 900 millones de dólares, unos 3000-5000 millones menos de los 22 000-24 000 millones que se necesitan anualmente hasta 2015.

En 2012, se estima que:

35,3 millones [32,2–38,8 millones] de personas vivían con el VIH en el mundo

2,3 millones [1,9–2,7 millones] de personas se infectaron con el VIH

1,6 millones [1,4–1,9 millones] de personas murieron a causa de enfermedades relacionadas con el sida

ONUSIDA

El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para conseguir su visión compartida de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. El ONUSIDA reúne los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados globales y nacionales para maximizar los resultados de la respuesta al sida. Acceda a más información en unaids.org.