Se desbloquea el acuerdo de pesca UE-Marruecos

Marruecos ha ratificado el Protocolo de pesca para que los buques europeos vuelvan a faenar en aguas marroquíes tras una pausa de más de dos años. Ahora que ambas partes han concluido el procedimiento de ratificación, los buques de la UE obtendrán determinados derechos de pesca en aguas marroquíes, a cambio de la ayuda financiera europea para el desarrollo del sector de la pesca del país africano.
Pescadores
Pescadores / Foto: CE

Marruecos ha ratificado el Protocolo de pesca para que los buques europeos vuelvan a faenar en aguas marroquíes tras una pausa de más de dos años. Ahora que ambas partes han concluido el procedimiento de ratificación, los buques de la UE obtendrán determinados derechos de pesca en aguas marroquíes, a cambio de la ayuda financiera europea para el desarrollo del sector de la pesca del país africano. En diciembre de 2013 la Unión Europea y Marruecos concluían un acuerdo de pesca de 4 años, pero su entrada en vigor quedó suspendida a la espera de su ratificación por el país magrebí.

El protocolo es el segundo más importante de su tipo y pertenece a una nueva generación de acuerdos de pesca después de la reforma de la política pesquera común de la UE, que presta especial relevancia a la sostenibilidad medioambiental, la rentabilidad y la legalidad internacional.

La Comisaria Europea de Pesca y Asuntos Marítimos, Maria Damanaki, ha declarado que está «muy satisfecha de que este Protocolo pueda por fin entrar en vigor: nuestros pescadores llevan esperando este día más de dos años. Ahora tenemos que asegurarnos de que nuestra flota reanude sus actividades lo antes posible. Este nuevo Protocolo es un ejemplo de la gobernanza internacional en materia de pesca responsable: hemos garantizado que los derechos de pesca de la UE no superen el límite fiable desde el punto de vista científico, lo que garantiza una pesca sostenible y que los buques europeos no compitan con los pescadores locales. Confío en que el apoyo financiero de la UE ayudará a construir un futuro sostenible para las pesquerías marroquíes a través del apoyo sectorial específico».

A partir de ahora podrán faenar en la zona un máximo de 120 buques de 11 Estados miembros (España, Portugal, Italia, Francia, Alemania, Lituania, Letonia, Países Bajos, Irlanda, Polonia y Reino Unido). Las posibilidades de pesca se han incrementado en un tercio en comparación con el Protocolo anterior y ahora abarcarán un total de 80.000 toneladas para las pequeñas especies pelágicas con posibilidades de pesca adicionales para la pesca artesanal, demersal y atunera. En total, 6 categorías de pesca explotadas por segmentos de la flota artesanal y la industrial están cubiertas por el Protocolo.

El coste para los contribuyentes de la UE para acceder a estas mayores posibilidades ha disminuido en un 30% en comparación con el Protocolo anterior. El coste total para la UE ascenderá a 30 millones de euros al año, de los cuales 16 millones de euros compensan a Marruecos por el acceso a los recursos y 14 millones de euros se destinan a ayudar al sector pesquero en el país. Además, la contribución de los armadores se estima en 10 millones de euros, lo que supone una dotación financiera total para Marruecos de un valor estimado de 40 millones de euros, mientras que el nuevo Protocolo prevé, además, un aumento de las oportunidades de empleo de los marineros marroquíes.

En el Protocolo se incluye una cláusula de derechos humanos y, al igual que en todos los acuerdos comunitarios, un mecanismo de suspensión garantiza que la UE puede suspender unilateralmente el Protocolo en caso de violaciones de los derechos humanos. La obligación de Marruecos de presentar informes periódicos y pormenorizados contribuirá a demostrar el impacto económico y social del apoyo sectorial en las poblaciones locales. Este mecanismo de información incluirá detalles sobre cómo cada proyecto de apoyo sectorial sirve a los intereses de la totalidad de la población local sobre una base geográfica.

El último Acuerdo de pesca con Marruecos finalizó en diciembre de 2011. Tras un largo proceso de negociación, un nuevo Protocolo aprobado por el Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros se firmó a finales de 2013. La entrada en vigor se había retrasado hasta ahora, a la espera de la ratificación del convenio por parte de Marruecos.