Ultimátum de Reino Unido a la UE: o hace reformas o se va

El ministro británico de Economía, George Osborne, plantea este miércoles en una conferencia organizada por dos grupos euroescépticos que si la Unión Europea sigue por este camino de decadencia se expone a perder a Gran Bretaña y exige que se hagan reformas urgentes. Osborne dice que los veintiocho son menos competitivos que China o India.

George Osborne
George Osborne, ministro de economía de Reino Unido

Según el ministro los tratados de la UE no sirven para las reformas que a su juicio son necesarias por lo que hay que hacer unos nuevos. «No podemos seguir así» argumenta tajante Osborne en la conferencia sobre la reforma de la UE que han organizado dos grupos euroescépticos: Open Europe y Fresh Start Project.

Para Osborne el fracaso económico de Europa proviene de aquellos que no quieren la reforma y que se mantienen en «un status quo que condena a los pueblos de Europa a una crisis económica permanente».

La propuesta británica, la misma planteada por el premier Cameron en otras ocasiones, es renegociar el estatus británico en la Unión y a continuación celebrar el referéndum que los conservadores proponen. «Dejar que el pueblo decida». Siempre que su partido gane las próximas elecciones generales de mayo de 2015.

En el texto del discurso, que ha sido facilitado por la oficina del ministro antes de que este lo pronuncie, destaca la falta de competitividad de Europa en los últimos seis años y señala que en el mismo periodo, la economía india ha crecido un tercio y la china en casi un 70 por ciento.

Las reformas a las que alude serían, según Osborne, para dotar al euro de una «base más firme» y para que estados como Gran Bretaña que no han adoptado la moneda única tengan una mayor protección.

En su discurso, Osborne, plantea que la salida británica de la Unión dejaría a esta con un complicado escenario. Que «un país del tamaño y el alcance global de Gran Bretaña se fuera sería muy malo para la Unión Europea.»

El gobierno de Cameron tiene que lidiar con una difícil coalición con los demócratas liberales partidarios de la Unión Europea y los conservadores entre los que hay muchos euroescépticos que cuestionan normativas de la UE que van desde la economía a los derechos de movimiento de ciudadanos europeos como rumanos o búlgaros.

El pasado fin de semana más de 90 parlamentarios conservadores sin cartera escribieron una carta a Cameron exigiendo que el Parlamento vete todas las leyes de la UE. El gobierno la rechazó diciendo que dañaría el mercado único.