Europa quiere que Egipto recupere su papel en Oriente Próximo

La sede de la Comisión Europea ha sido el primer viaje del presidente egipcio, Mohamed Morsi, a Europa tras su elección en junio. Una gira que se produce en medio de los disturbios de las últimas horas en El Cairo contra la proyección de un video en youtube que difama la imagen de Mahoma. El mandatario egipcio ha rechazado esos enfrentamientos y el ataque al consulado de EE.UU en Bengasi. Aunque su visita tiene otros puntos de interés.

Barroso cede el paso a Morsi en la sede de la Comisión Europea
Barroso y Morsi en Bruselas / Foto: CE

La crisis siria, pero sobre todo, la tansición política egipcia y la situación económica de ese país son los temas de la agenda de Morsi en Europa. El presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, le ha dicho que la UE sigue muy de cerca la redacción de la constitución egipcia, pidiéndole que «salvaguarde los derechos y libertades de todos los egipcios», y ha pedido a Morsi que las elecciones parlamentarias se realicen lo antes posible para finalizar el proceso de transición.

Pero a Morsi lo que más le preocupa es superar la crisis económica que vive Egipto tras la caída del regimen de Mubarak y recuperar su papel de potencia regional que ha perdido en el último año a favor de Turquía. En ese sentido quiere participar en las decisiones internacionales sobre Siria. El presidente de la Comisión le ha explicado las prioridades de Europa sobre ese país, dejando claro que Al Asad debe abandonar el poder. «Ningún presidente que mata a su pueblo, puede seguir en el poder», ha dicho, tras señalar que esperan que en Siria se pueda realizar una transición como la egipcia. Barroso también ha destacado que es importante que Egipto vuelva a jugar un papel importante en esa región.

Eso es lo que está intentando hacer en las últimas semanas. Antes de viajar a Europa, Morsi ha estado en Arabia Saudí, China e Irán -por ese orden- y ha lanzado una propuesta para formar un grupo de contacto sobre Siria, formado por Egipto, Turquía, Irán y Arabia Saudí. En unos días viajará a Estados Unidos, su antiguo aliado en la región.

En clave interna el nuevo rais egipcio, llega a Bruselas pocas horas después de que la justicia del país norteafricano haya condenado al exprimer ministro, Ahmed Nazif, a tres años de cárcel y a pagar más de un millón de euros por enriquecimiento ilegal. Hace un mes recomponía la junta militar, que controlaba la política y la economía del país.

En Europa, Morsi se entrevistará con el primer ministro belga, Elio Di Ruppo y mañana en Italia con el presidente Giorgio Napolitano y el primer ministro, Mario Monti.

Leer también en eXp: Periodismo en Egipto: nuevo gobierno, viejas mordazas