600.000 personas pasan al año por los casi 500 CIEs de la UE

Desde hace veinte años, el confinamiento de migrantes y demandantes de asilo no cesa de aumentar en la Unión Europea y sus fronteras meridional y oriental. Entre 2002 y 2012, el número de lugares de confinamiento censado por el observatorio de las fronteras Migreurop en los países de la UE y en sus fronteras ha pasado de 324 a 473. Cada año cerca de 600.000 personas extranjeras son privadas de libertad en el territorio de la UE con fines de «gestión migratoria».

Dibujo, unas manos se agarran a una alambrada con pinchos
En la UE hay 473 Centros de Internamiento para Extranjeros/ Foto: UE 2014/ PE

El 15 de junio, Día contra los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs), se ha lanzado la versión en castellano de la web closethecamps.org (hasta ahora sólo en inglés y francés), una base de datos y una cartografía dinámica del encierro de personas extranjeras, que busca promover el acceso del mayor número de personas a las informaciones relativas a la detención administrativa y sus consecuencias sobre la vida y los derechos de las personas migrantes. La web closethecamps.org nació en diciembre de 2013 como parte de la campaña Open Access Now, lanzada en 2011 solicitando un acceso incondicional de la sociedad civil y periodistas a los centros de detención de extranjero/as.

La creación de una jornada contra los CIEs busca «hacer visible lo invisible», según los organizadores. «Los Centros de Internamiento de Extranjeros son cárceles racistas que atentan contra el Estado de Derecho. El objetivo es visibilizar esta realidad tan desconocida aún, que afecta a vecinas y vecinos de nuestros barrios. Las organizaciones que trabajamos en esto nos damos cuenta de lo difícil que es darla a conocer. El primer paso para cambiar algo es hacerlo visible», añaden desde la web de la convocatoria.

Estos centros de confinamiento, donde son detenidas las personas migrantes por el único motivo de «no respetar» las reglas relativas a la entrada y estancia, son lugares administrativos de privación de libertad y no prisiones. «Sin embargo, aunque no tengan ese nombre, a menudo lo parecen», apuntan desde Migraeurop. «El carácter casi impenetrable de estos lugares, a menudo coronados de alambradas, hace difícil el acceso de la sociedad civil, periodistas y familiares de las personas detenidas, dejándolas así solas frente a su angustia. Aunque han podido constatarse algunos avances, siguen poniéndose trabas a la vigilancia ciudadana que tratamos de promover».

«Los CIE son puerta de entrada y puerta de salida de España», recoge el Informe CIE 2013 'Criminalizados. Internados. Expulsados', de la fundación jesuita Pueblos Unidos quien considera que en España se abusa de los internamientos. «Muchas personas acaban en los CIE por carecer de residencia a pesar de llevar muchos años en España. Son personas muy arraigadas en nuestro país que cuentan con una orden previa de expulsión (...) descubrimos con frecuencia personas en situación de pobreza, de exclusión (...). No delincuentes, sino pobres», recoge también este informe.

La situación de los CIEs en España (hay 8) ha sido duramente criticada y denunciada por personas internas y por organizaciones sociales y civiles, así como las detenciones de inmigrantes y los vuelos de repatriación. Sólo en 2013, 4500 personas fueron recluidas en los Centro de Internamiento para Extranjeros de Madrid y Barcelona