Dijsselbloem: «Trabajar más tiempo y más duro»

Para el ministro de Finanzas de Holanda y presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, el futuro económico pasa por más reformas laborales y retrasar la edad de jubilación, una receta que, confiesa, no diría en voz alta en su país. Ha declarado que la recuperación económica es una realidad palpable, pero ha recordado que aún hay retos por delante y que no se ha terminado el trabajo.

El presidente del eurogrupo de el ministro español de economía
Dijssembloem, ministro de Economía de Holanda y presidente del Eurogrupo y el ministro de Economía español, Luis de Guindos/ Foto: Foro Europa

El encuentro informativo de este lunes en Madrid, en el que también ha hecho una presentación el ministro de Economía español, Luis de Guindos, ha servido para hacer un repaso del estado de las economías europeas en su conjunto y de los retos que se plantean para su total recuperación futura.

Dijsselbloem también ha hecho varias menciones a la situación de la economía española alabando las labores de reforma llevadas a cabo por el Gobierno de España, y ha afirmado que «todo indica que España ya ha empezado a pasar página en lo que se refiere al camino de la recuperación».

En cualquier caso, defendió que factores demográficos, como que cada vez se viva más años y se empiece a trabajar más tarde, hacen necesario ampliar la edad de jubilación.

Asimismo, y en referencia a las prioridades en España, ha dicho que en su opinión son necesarias más reformas en el mercado laboral debido a que «el desempleo es muy alto, sobre todo para los jóvenes».

El Ministro holandés de Finanzas ha expresado su preocupación por que se siga trabajando en este camino, y ha recordado que no se ha conseguido la recuperación total, aunque se haya avanzado mucho. En sus palabras, Dijsselbloem ha recordado que los dos retos a los que se enfrenta la UE son «restaurar el patrón de crecimiento económico y conservar el modelo social europeo», un modelo que ha definido como «la base de la especificidad europea e inspiración de las políticas que han de adoptar los Estados Miembros. Es crucial mantener este modelo y sus elementos fundamentales en toda la UE». Eso sí, también ha recordado que «como la situación en la que se encuentran los distintos países no es idéntica, las necesidades de unas u otras medidas también habrán de ser distintas entre países».

Según Dijsselbloem, uno de los pasos definitivos para la estabilización de la situación actual es avanzar hacia la unión bancaria en la UE, un proceso en el que afirma que «España está en situación de ventaja porque sus bancos ya han sido saneados.» Con este proyecto, el titular holandés de Finanzas espera que «el problema del crédito se vaya resolviendo, y que éste vuelva a fluir a las familias y empresas.»

Otro de los retos que ha mencionado es el de liberalizar más el mercado de trabajo común, avanzando, entre otros frentes, en las más de 4.700 profesiones protegidas en el conjunto de la UE. También se ha referido al reto del envejecimiento de la población europea, haciendo mención a la polémica sobre la edad de jubilación diciendo que «la esperanza de vida ha aumentado en los últimos 20 años y ahora los jóvenes se preparan más e ingresan más tarde en el mercado de trabajo, por lo que parece lógico que se trabaje también hasta una edad más avanzada».

Dijsselbloem ha repetido en varias ocasiones que es necesario coordinar los esfuerzos entre los Estados Miembros, para que las reformas y acciones vayan más allá de las presiones entre estados. A este respecto, ha recordado que «es crucial que todos los países estemos de acuerdo en un proyecto común». También se ha referido a las ventajas que recibirán aquellos países que pongan en marcha una política adecuada de reformas en su territorio diciendo que «si un país promueve reformas fuertes, los plazos de los compromisos fiscales de dicho país podrán ampliarse».

Por su parte, Luis de Guindos, Ministro español de Economía, ha hecho la presentación de su homólogo holandés, en la que ha recordado que «se ha superado la primera crisis del proyecto del euro» y ha afirmado que «el euro no es un problema de la crisis, sino una solución a estos tiempos difíciles».