España continúa a la cola en I+D+i

La investigación sigue sin remontar en España. Según el Informe Cotec 2014 sobre Tecnología e Innovación, la inversión destinada a innovación y desarrollo está todavía 20 puntos por debajo de la media de los países que más dinero gastan en este concepto en Europa: Alemania, Francia, Italia, Polonia y Reino Unido.

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Laboratorio / Foto: CE

«Continúa la pérdida de posiciones de España», ha lamentado Juan Mulet, director general de la fundación Cotec, durante la presentación del informe este martes en Madrid. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, el gasto en innovación y desarrollo cayó en 2012 (último dato disponible) un 4,2%. Por el contrario, en ese mismo periodo, los cinco países que más invierten en I+D+i aumentaron su partida en un 16,4%.

El informe señala que España registró en 2012 un gasto de 13.392 millones de euros, lo que supone destinar a I+D+i un 1,3% del producto interior bruto. «Son niveles inferiores a los que se registraron en 2008», advierten desde la fundación Cotec. Y es que este dato queda muy lejos de los 73.733 millones de euros invertidos por Alemania en 2012, el 2,92% de su PIB; o de los 40.217 millones de euros que destinó Francia a esa misma partida, el 2,26%.

«España no está aprovechando el conocimiento, como sí lo hacen otros países», advierte el director general de Cotec, que ha lamentado que este año se haya registrado la mayor caída desde el inicio de la crisis. De hecho, a su juicio estos últimos datos lastran la buena evolución que tuvo nuestro país hasta el inicio de la crisis, cuando consiguió acercarse a la media europea. «Ha supuesto el fin de una continuada tendencia a la convergencia», ha asegurado.

El sector privado, el único que se salva

Aunque la reducción de la inversión en innovación e investigación ha sido generalizada para todos los sectores, Juan Mulet, ha destacado el hecho de que el sector privado haya conseguido mantener esta inversión más o menos constante. «Posiblemente es la única buena noticia que arroja el informe», ha asegurado. «En los años de bonanza económica se creó un sistema de innovación formado por unas 13.000 empresas, que más o menos se mantiene», ha explicado.

De hecho en 2014, más de la mitad del gasto en I+D+i en España, el 53,2%, se registró en el sector privado, frente a una «preocupante caída del sector público». Pese a todo, Mulet ha destacado que la inversión privada en innovación continúa siendo «insuficiente». En Europa, de los cinco países que más dinero destinan a la investigación y el desarrollo sólo Polonia tiene una participación del sector privado inferior al 60%; España todavía está a siete puntos de conseguirlo.

Además, Mulet también ha mostrado su preocupación por la pérdida de investigadores que está sufriendo el sector público. Según el informe, mientras que en las empresas públicas se mantiene en número de trabajadores a tiempo completo en departamentos de investigación e innovación, en los centros de investigación públicos se ha reducido significativamente. «Estamos perdiendo investigación», ha lamentado y advierte que en la administración resulta muy difícil renovar unos equipos de investigación cada vez más envejecidos. «Lo pagaremos», ha advertido.

Por comunidades autónomas, País Vasco y Castilla y León son las dos únicas que han mejorado sus indicadores respecto de 2013. De hecho, según el informe, Madrid, Cataluña, Andalucía, País Vasco y Valencia aglutinan el 77% del gasto total en I+D+i en España.

Para los expertos consultados por Cotec, la dificultad para financiar estas inversiones sigue siendo uno de los principales problemas para la innovación española. Advierten que en comparación con otros países, España cuenta con un escaso número de empresas innovadoras, a lo que tampoco contribuye el deterioro del sistema público de I+D+i. Además, alertan de una «evidente falta de consciencia social», en lo que a la importancia económica de la innovación se refiere.

Pese a todo, en Cotec destacan que hay razones para el optimismo porque los expertos observan un cambio de tendencia desde el inicio de 2014, cuyos frutos, previsiblemente se verán reflejados en el informe del año que viene.