LGTB
El parlamentario

Louis Michel, copresidente de la Asamblea Parlamentaria Paritaria entre la UE y los países ACP (África, Caribe y Pacífico), ha rechazado la ley contra los homosexuales que se aprobó en Uganda el pasado febrero. En la apertura de la 27 sesión conjunta ha señalado que la criminalización de ese colectivo contraviene los acuerdos internacionales y añadió que «debe ser revocada», algo que están intentando en Uganda.

El 19 de febrero, Día Internacional contra la Homofobia en el Fútbol, se recuerda a Justin Fashanu, primer futbolista profesional en salir del armario. Él sufrió en sus carnes la cruda homofobia existente en el mundo del fútbol cuando en 1990 admitió su homosexualidad. Para él significó el fin de su carrera profesional y el inicio del fin de su vida. Fue apartado de su equipo, el entonces Campeón de Europa Nottingham Forest, fue objeto de mofa por parte de su entrenador, compañeros y evidentemente, la afición. A partir de ahí, nunca más conseguiría un contrato permanente con ningún equipo

Los Ángeles, hasta el 26 de enero

Protestas en Londres contra leyes rusas antigays

Los homosexuales perseguidos en sus países por su orientación sexual, podrán pedir asilo en Europa. El Tribunal de Justícia de la UE ha emitido una sentencia a favor de tres ciudadanos africanos que viven en Holanda. No bastará con que en su país la legislación tipifique como delito la homosexualidad, sino solo en aquellos que suponga el encarcelamiento de esas personas.

Manifestación, una pancarta que dice

Miércoles 2 de octubre. Troto junto al canal de Ourcq (noreste de París). Son las 12 en punto de la mañana y suenan las sirenas de alarma aérea. Desde la II Guerra Mundial, es habitual en Francia. Los primeros miércoles de mes suenan durante un minuto; se callan, y vuelven a sonar durante otro minuto. Deberían recordar a la gente el origen de la mayor tragedia histórica de los últimos siglos y cómo surgió el fascismo. Pero la mayoría no lo percibe siquiera como ruido callejero.

Manifestantes con pancartas

San Petersburgo, (IPS)- «En Rusia está bien ser gay si uno vive en una ciudad grande como San Petersburgo o Moscú, estudia en la universidad o trabaja en una empresa liberal, pero incluso así no puedes sentirte absolutamente seguro», dice Nikita Mironov, describiendo el clima de temor que impera en su país.

Mironov es editor del sitio web Queerculture.ru y vive en San Petersburgo, la segunda ciudad del país.