La calidad del aire en la UE se ha deteriorado en los últimos 10 años

Los europeos creen que el aire que respiran ha ido empeorando en los últimos 10 años. El 81 por ciento de los italianos está convencido, así como un 75 por ciento de los españoles. Una mayoría de ciudadanos de la UE opina que sus gobiernos les informan mal sobre la calidad del aire y piden a la Unión que tome medidas para que se solucionen esos problemas que afectan a su salud y a la de sus familiares.

Gran cantidad de coches en la carretera
Los europeos reclaman más información sobre la calidad del aire/ Foto: CE

Cuatro de cada cinco personas que ha participado en la encuesta de Eurobarómetro «Actitudes de los europeos hacia la calidad del aire» cree que es la UE la que debe proponer más medidas para hacer frente a la contaminación del aire. Además confiesan estar mal informados sobre las normas comunitarias de calidad del aire y los techos nacionales de emisión, sólo un 25 % dice que conoce la normativa.

Los españoles son de los europeos más descontentos con la actuación de sus autoridades para atajar la contaminación aérea. El 87 por ciento cree que no se hace lo suficiente, por delante están los griegos con un 91 por ciento. También son los más convencidos de que los productores de energía no adoptan suficientes medidas para mantener la calidad del aire, el 81 por ciento, la media europea es del 61 por ciento.

Entre los europeos que creen que el aire de su país ha empeorado en los últimos diez años están los italianos (81 por ciento), le siguen húngaros y españoles (75 por ciento). El 96 por ciento cree que las emisiones de los vehículos son las principales culpables de la contaminación, seguidas por la industria (92 por ciento) y el transporte internacional (86 por ciento)

A la pregunta de la forma más eficaz para hacer frente a la contaminación del aire, el 43 por ciento contesta que hacer controles más estrictos a las emisiones de la industria y la producción de energía. A los coches eléctricos y los híbridos electricidad-gasolina es los que se considera más limpios y a la electricidad el sistema de calefacción más verde para los hogares, seguida por la biomasa de madera y el gas.

Siete de cada diez europeos cree que se debe dar prioridad a las energías renovables. Una gran mayoría, el 85 por ciento está de acuerdo con el principio de «quien contamina paga». A nivel personal señalan como medidas más importantes e inmediatas reducir el uso del automóvil y sustituir los viejos aparatos poco eficientes.