La OMS advierte a Europa que se prepare para la fiebre chikungunya

Dos tipos mosquitos son los causantes de la enfermedad vírica, la fiebre chikungunya, propagada por dos tipos de mosquito, para la que aún no hay tratamiento. Uno de los mosquitos reside en zonas tropicales y el otro en zonas templadas, este último es el causante de diferentes casos en Italia y en Francia.

Un mosquito sobre el brazo de una persona
Mosquito causante de la fiebre chikungunya

En Europa, al contrario que en África, el virus del ébola parece haber dado un respiro a las autoridades sanitarias y, por extensión, a la población en general ya que, de momento, no se han detectado nuevos casos en las últimas semanas. Hoy sale del hospital la española Teresa Romero, primera contagiada de ébola fuera de África.

Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de poner sobre aviso al viejo continente advirtiéndoles que se prepare para un nuevo virus, la fiebre chikungunya.

En las últimas décadas este virus, originario de África y Asia, se ha establecido en algunas zonas de América y ahora, también en Europa. En la actualidad, en estos continentes ya se han detectado casos en, al menos, 40 países lo que ha alertado a la OMS que avisa a los diferentes países para crear y mantener los recursos necesarios para detectar los casos de fiebre chikungunya.

La fiebre chikungunya es una enfermedad vírica transmitida por mosquitos a los humanos y para la que por el momento no se ha encontrado ningún tratamiento específico. Entre sus síntomas, algunos similares a otras enfermedades más comunes, fiebre, fuertes dolores articulares, dolores musculares y de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas.

El virus del chikungunya fue detectado por primera vez en 1952 en el corazón de África, Tanzania, y en 2007 se notificó el primer brote en Europa concretamente al nordeste de Italia donde se registraron 197 casos como consecuencia de la picadura del mosquito Ae. Albopictus. El pasado 21 de octubre, se confirmaron otros cuatro casos de infección en la localidad francesa de Montpellier.

Se encuentran localizados dos tipos de mosquitos que transmiten esta enfermedad. Por un lado, el Ae. aegypti causante de los grandes brotes de fiebre chikungunya pero confinado a las zonas tropicales y subtropicales. Y, por otro, el Ae. albopictus presente en regiones templadas e incluso templadas-frías, lo que ha ocasionado los primeros casos en el sur de la Unión Europea.

Solo en América y desde diciembre de 2013, la fiebre Chikungunya ya ha sido identificada en una treintena de territorios del Caribe, América Central, Sudamérica y Norteamérica. Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), hasta el pasado día 24 de octubre la cifra de afectados ascendía a un total de 776.089 casos sospechosos, 12.993 confirmados de transmisión autóctona y 1817 importados.

Uno de los primeros síntomas de haber sido infectado por el virus es la aparición entre el segundo y el quinto día después de la primera fiebre, la aparición de una erupción maculopapular por el tronco y las extremidades, que también puede afectar a las palmas de las manos, las plantas de los pies y el rostro.

De momento, no hay un tratamiento específico ni una vacuna disponible para el control de CHIK aunque su detección a tiempo puede ayudar a que el paciente no tenga complicaciones.