La UE, uno de los mejores socios para el desarrollo de Sudáfrica

Pretoria se ha convertido en la segunda ciudad, después de Washington, para las misiones diplomáticas según su embajadora en Madrid, Fikile Magubane. No solo para la diplomacia también para los negocios. Sudáfrica es la primera economía del continente africano y el único miembro de la región en el G-20. Magubane ha destacado la gran oportunidad de negocio que podrían tener las PYMES españolas en su país.

Fikile Mugabane, en la conferencia
Fikile Mugabane, Embajadora de Sudáfrica en España/ Foto: Executive Forum

La embajadora explica que su país está inmerso en el desarrollo del Plan de Recursos Integrados para el que cuenta con la experiencia de España en energías renovables. Cada vez hay más empresas españolas en Sudáfrica y Magubane destaca el papel que han tenido en su país en los últimos años.

El plan de Recursos Integrados sudafricano pretende abastecer de energías limpias al país en un plazo de 20 años. El 42 por ciento de la energía «vendrá de energías renovables». En estos momentos el 90 por ciento de la electricidad del país proviene de centrales termoeléctricas a carbón que emiten grandes cantidades de CO2 a la atmósfera.

Sudáfrica es una de las economías emergentes más potentes del mundo. Fikile Magubane ha explicado en una reunión de Executive Forum en la que ha sido presentada por el Consejero Delegado de Abengoa, Manuel Sánchez Ortega, que la mejora económica que el país ha vivido en los últimos 20 años le ha permitido realizar importantes cambios sociales.

«la mejora de la educación, la sanidad, la lucha contra el crimen y la corrupción, el desarrollo del medio rural y la creación de empleo son objetivos prioritarios», ha dicho. Uno de los motores de ese progreso ha sido las buenas relaciones que mantiene con la Unión Europea.

«La Unión europea es de lejos el socio más importante de Sudáfrica, proporcionando casi el 70% de nuestro fondos de asistencia externa», ha señalado Fikile Magubane. Las exportaciones europeas a Sudáfrica ascendieron a 26.000 millones de euros en 2012, mientras que las importaciones fueron de 20.500 millones de euros, según Eurostat.

En cuanto a la ayuda al desarrollo por parte de la UE fue de cerca de 1.000 millones de euros entre 2007 y 2013 y otros 900 millones aportados por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) en el mismo periodo de tiempo.

Desde hace varios años la UE y las diferentes regiones africanas negocian un acuerdo comercial. En el que se lleva a cabo con África meridional (Botsuana, Lesoto; Suazilandia y Mozambique) es fundamental la posición de Sudáfrica, el mayor país de la región que ya firmó en 1999 un Acuerdo de comercio, desarrollo y cooperación por el que la UE y el país africano han suprimido ya el 95 % y el 85 % de sus aranceles respectivos.

La Unión Europea y Sudáfrica mantienen estrechas relaciones parlamentarias bilaterales, que se reforzaron con la Asociación Estratégica UE-Sudáfrica en 2007, la única asociación estratégica bilateral de la Unión con un país africano.