La UE ve buenas perspectivas en el diálogo nuclear con Irán

Se han reanudado en Estambul las conversaciones sobre el programa nuclear iraní, interrumpidas desde enero de 2011, entre el grupo 5+1, encabezado por la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, y representantes de la república islámica. Tras el primer encuentro, un portavoz de la UE considera que el diálogo es constructivo. La reunión se celebra en medio de tensiones por el embargo al petróleo iraní acordado por la UE y la amenaza militar israelí.

Negociadores del programa nuclear iraní en Estambul
Negociadores del programa nuclear iraní en Estambul / Foto:Hispantv

Después de meses de tira y afloja diplomáticos, el grupo de negociación internacional 5+1, que forman Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania ha reabierto la mesa de negociación con el negociador iraní, Said Jalili y con la Alta Representante para la Política Exterior y de Seguridad Europea, Catherine Ashton, como jefa de la delegación internacional.

Su portavoz, Michael Mann, ha dicho, tras la primera sesión de conversaciones, que la reunión se ha celebrado en «una atmósfera constructiva. Hemos tenido la sensación positiva de que Irán quiere implicarse». El grupo internacional pretende que Irán paralice sus trabajos de enriquecimiento de uranio que la república islámica asegura que realice con fines pacíficos y la comunidad internacional sospecha que sirve para preparar la bomba atómica.

El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) denunció que sus inspectores no pudieron acceder al complejo militar de Parchin, donde se cree que se realizan pruebas nucleares con objetivos militares. Irán, por su parte, dice estar dispuesto a abrir esas instalaciones a la OIEA, pero reivindica su derecho a contar con tecnología nuclear.

Nadie espera soluciones de esta reunión de Estambul, pero sí que se abra el camino para otra cumbre que se celebraría próximamente en Bagdad ya con pretensiones concretas por ambas partes. La reunión de este sábado se celebra tras haber decidido la UE aplicar un embargo al petróleo iraní desde el 1 de julio y haber respondido Irán con suspender el suministro de petróleo a España y Grecia y anunciar que estudia más cortes de abastecimiento a otros países de la UE. Más allá de la repercusión comercial y energética, el anuncio de Israel de tomar represalias militares contra Teherán ha abierto una nueva y preocupante vía de tensión internacional.