La Unesco premia la labor educativa del Centro de Educación Permanente Polígono Sur de Sevilla
El Centro de Educación Permanente Polígono Sur de desarrollo comunitario, ha obtenido uno de los tres premios Unesco-Confucio, por el programa «Trabajo en red como proyecto educativo». El centro desarrolla su labor en un barrio desfavorecido de Sevilla con población culturalmente heterogénea: española, norteafricana y de etnia gitana.
Mano con colores
Mano con colores / Foto: Junta Andalucía

El Centro de Educación Permanente Polígono Sur de desarrollo comunitario, ha obtenido uno de los tres premios Unesco-Confucio, por el programa «Trabajo en red como proyecto educativo». El centro desarrolla su labor en un barrio desfavorecido de Sevilla con población culturalmente heterogénea: española, norteafricana y de etnia gitana. Su programa de educación permanente incluye actividades de alfabetización, formación profesional, formación para el graduado escolar y habilidades para el empleo y la creación de pequeñas empresas.

El Centro Poligono Sur realiza actividades comunitarias como conciertos y obras de teatro para enseñar cultura y ecología. La Unesco ha destacado que se trata de un programa, muy innovador, que «ha conseguido introducir la alfabetización básica en procesos de desarrollo comunitario más amplio, demostrando así el potencial catalítico y transformador de la alfabetización».

Los otros ganadores de esta categoría son la Asociación Argelina para la Alfabetización IQRAA, el instituto Molteno de Lenguaje y Alfabetización (Sudáfrica), y el Instituto Internacional de Alfabetización.

La Asociación Argelina para la Alfabetización IQRAA, que quiere decir «leer» en árabe, una organización no gubernamental fundada en Argelia en 1990, por su programa sobre «Alfabetización, formación e integración de las mujeres». Los programas de la IQRAA adoptan enfoques innovadores para integrar a mujeres que viven en áreas aisladas en situaciones de extrema pobreza combinando la alfabetización con la enseñanza de habilidades generadoras de ingresos. Así, la alfabetización se hace mediante actividades generadoras de ingresos desarrolladas por centros de enseñanza vocacional certificados. El programa ha apoyado a más de 17.000 personas y ofrece además asesoramiento legal a sus ex alumnos, a quienes ayuda a gestionar los pequeños negocios creados tras la formación.

El instituto Molteno de Lenguaje y Alfabetización (Sudáfrica), y el Instituto Internacional de Alfabetización han sido premiados por su programa «Puentes para iniciativas de futuro» que usa tecnologías de la comunicación y la información para capacitar a personas de todas las edades de zonas rurales y urbanas poco desarrolladas. Ofrece métodos de alfabetización interactivos y por computadora en inglés y otras tres lenguas africanas a niños, jóvenes y adultos. Iniciado en 2007, ha beneficiado a 6.000 adultos y 30.000 niños, que se han formado en sus centros de formación y educación básica. Sus temarios incluyen nociones de salud, medioambiente, desarrollo social y formación profesional. Este programa es además un ejemplo exitoso de cooperación Norte-Sur, puesto que es resultado de la cooperación entre el Instituto Internacional de Alfabetización de la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos) y una organización sudafricana que trabaja en varios países de la región.

El premio Unesco-Confucio de Alfabetización fue creado en 2005, con el apoyo del gobierno de la República Popular China, y reconoce las actividades de particulares, gobiernos, organismos gubernamentales y ONG que se han destacado en la alfabetización de jóvenes sin escolarizar y adultos, en particular de las niñas y las mujeres, que viven en zonas rurales.

El nombre del premio honra la memoria del célebre pensador chino Confucio.Cada uno de los dos ganadores recibe una suma de 20.000 dólares estadounidenses, una medalla y un diploma, con los que está dotado el galardón. Además, el Premio Confucio ofrece la posibilidad de realizar un viaje a China, a fin de estudiar sobre el terreno los proyectos de alfabetización que se llevan a cabo en ese país.

También se han dado a conocer a los ganadores del premio Unesco-Rey Sejong, que han sido para dos proyectos en Ecuador y Burkina Faso. El ministerio de educación de Ecuador, ha sido reconocido por su proyecto de alfabetización básica para jóvenes y adultos, que ha beneficiado a más de 325.000 personas desde 2011. El programa no sólo enseña a leer y escribir, sino que incluye educación a la ciudadanía, salud y nutrición. También brinda educación en lengua materna a las poblaciones indígenas con un enfoque basado en su cosmovisión.

La Asociación para la promoción de la educación no formal de Burkina Faso ha sido premiada por su programa de «Capacitación de mujeres en situación de pobreza extrema», cuyo objetivo es mejorar las vidas de las mujeres a través de la alfabetización, de la educación en salud y de la formación en desarrollo económico sostenible. El programa ofrece también microcréditos. Desde su creación, en 1997, el programa ha beneficiado a 18.000 mujeres en un país plurilingüe y multicultural, contribuyendo a la lucha contra la pobreza, la deforestación y la contaminación mediante actividades en cinco idiomas locales.

Cada año, la UNESCO invita a los Estados Miembros y las ONG internacionales que mantienen relaciones formales con la Organización a que presenten candidaturas a los Premios Internacionales de Alfabetización. La selección de los ganadores corre a cargo de un jurado internacional designado por la Directora General de la UNESCO, que se reúne anualmente en la Sede de la Organización en París. Los premios suelen entregarse en la ceremonia oficial de conmemoración del Día Internacional de la Alfabetización (8 de septiembre).