Libia costó 1,6 millones de euros por día, Afganistán 1,4 millones y Mali, 2,7 millones. Hasta ahora la opinión pública es favorable a esta intervención militar pero los analistas creen que las críticas podrían aumentar según como evolucione el conflicto en el África Occidental. Alexandre Vautravers, jefe del Departamento de Relaciones Internacionales de la Universidad de Webster en Ginebra, ha dicho a France24, que «esas estimaciones pueden ser mayores», porque a parte de los sueldos de los soldados, Francia ha desplegado al Sahel importante material de vehículos terrestres pesados. El ministro de defensa ha dicho que se han movilizado unas 10.000 toneladas de material militar durante estos 15 días, según Le Parisien.

La opeación «Serval» ha desplegado en Mali unos 4.600 soldados, 3.500 de ellos en tierra. Le Drian ha dicho que se ha alcanzado el nivel máximo de tropas y Laurent Fabius, que a partir de marzo se reducirá el contingente, porque «hay que pasar el testigo a los malienses y africanos». Francia quiere así, que la guerra en el África Occidental entre en una nueva etapa, en la que estarán implicados otros países europeos que se dedicarán a la formación de soldados africanos. Pero queda pendiente saber qué apoyo se da al gobierno de Bamako, muy debilitado y acusado de corrupción.

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