El presidente del Tribunal Constitucional, Joaquim Sousa Ribeiro ha dicho que «no hay medidas de restricción» y que las normas consideradas inconstitucionales «pierden su eficacia desde la entrada en vigor el 1 de Enero». Para el Constitucional las medidas del ejecutivo de Passos Coelho contravienen los artículos 29, 31, 77 y 117. Sousa Ribeiro ha señalado que «es la ley la tiene que cumplir la Constitución y no al revés». El gobierno deberá devolver unos 1.150 millones de euros, 610 referentes a subsidios a funcionarios y 540 por los subsidios a los pensionistas.

El Tribunal Constitucional ha vetado los presupuestos por clara mayoría. Nueve contra tres. Tal y como denunciaba el presidente Cavaco Silva, el Tribunal considera que se ha violado el principio de igualdad entre los ciudadanos. Los magistrados consideran que «la medida imponía un sacrificio adicional que no tenía equivalente para la generalidad de los ciudadanos».

No es la única mala noticia de esta semana para el primer ministro socialdemócrata luso. Manuel Relvas el ministro de asuntos palramentarios y uno de los políticos más polémico de Portugal, que ha protagonizado varios escándalos en los últimos años, dimitía ayer después de que le acusaran por irregularidades en la obtención del título de licenciado en política y relaciones internacionales. Además había sido acusado por los periodistas de presiones y amenazas y sus relaciones con un antiguo jefe de los servicios secretos al que acusan de espiar a personalidades y empresas.

No es el único problema del frágil gobierno de Passos Coelho, que esta semana ha superado, con los votos de los socialdemócratas de derechas y del Partido Socialista -con los que forman mayoría absoluta- una moción de censura del Partido Socialista. El primer ministro ha anunciado una reunión del Consejo de ministros a las 3 de la tarde mañana sábado.

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