Líneas wifi, telefonía celular, aparatos de televisión, microondas, líneas eléctricas, antenas de todo tipo, y un largo etcétera, producen lo que se denomina contaminación electromagnética, producida por las radiaciones generadas por equipos electrónicos. Estos aparatos transportan energía de un lugar a otro y sus campos eléctricos y magnéticos se propagan a través del espacio. A lo largo de la historia los seres humanos han estado expuestos a la radiación natural producida por la luz del sol o el campo magnético de la tierra, pero hasta ahora nunca había sido un fenómeno artificial y tan masivo.

El Parlamento Europeo ha aprobado nuevas medidas de seguridad para los trabajadores de los sectores más sensibles como la industria pesada del acero y el metal o personas que trabajen muchas horas en estaciones de radio y televisión, instalaciones de radares o torres de telefonía móvil.

La ponente del tema, la francesa Elisabeth Morin-Chartier (PPE), ha dicho que la nueva normativa «tiene por objeto reforzar la protección contra la exposición a los campos electromagnéticos en el lugar de trabajo» y ha añadido que «debe facilitar una cierta flexibilidad para tener en cuenta las necesidades específicas de ciertos sectores».

Los eurodiputados piden a la Comisión Internacional sobre Radiaciones No Ioniznates (ICNIRP), que realice nuevas recomendaciones y que estas sean más estrictas. Además los empresarios están obligados a evaluar los riesgos en la exposición y tomar las medidas necesarias para reducirlos. Si se superan los límites máximos la empresa deberá poner en práctica un plan de acción con medidas técnicas.

El Comité de Empleo y Asuntos Sociales ha pedido a la Comisión Europea y a los Estados miembros que aceleren las investigaciones y la recopilación de datos en informes que permiten conocer el impacto de la exposición a los campos electromagnéticos, a largo plazo, sobre todo en lo referente a los efectos sobre la salud. Con esos datos esperan poder realizar una nueva legislación para la prevención de futuras enfermedades.